Juan Manuel Sánchez Tena
Berlín, 31 may .- El Borussia Dortmund cotiza en bolsa desde el año 2000. Tiene una capitalización de mercado de 500 millones de dólares. Su pico llegó en octubre de 2018, cuando alcanzó los mil millones de dólares. La pandemia hizo estragos en las cuentas de la entidad con una recesión que duró tres años. En 2024 han crecido un 13% respecto al año anterior.
La afición del Borussia Dortmund puede presumir de poder participar en el día a día del control del club.
En cumplimiento de la normativa alemana para los clubes deportivos del 50+1 para la propiedad de los mismos, -salvo las permitidas excepciones del Bayer Leverkusen y el Wolfsburgo-, más de la mitad de la entidad está en manos del propio Borussia y sus socios.
Sin embargo, la parte cotizada del club revela algunos datos de calado. En su organigrama, el 67,24 % de la propiedad cotizada es de flotación libre; mientras que el propio Dortmund mantiene únicamente el 4,61% de esa capitalización.
El 8,24% lo posee el empresario Bernd Geske, dueño de la agencia de comunicación Lean Communication e hincha acérrimo del club; la aseguradora SIGNAL IDUNA, quien además de ponerle nombre comercial al estadio, dispone del 5,98 %; Evonik, compañía dedicada a la fabricación de productos químicos especializados, se queda con poco más del 8,19 %; Ralph Dommermuth, magnate de la empresa de telecomunicaciones alemana de United Internet AG, posee el 5,03 %, además de patrocinar al club en la camiseta con su filial 1&1; mientras que Puma, la multinacional alemana de ropa deportiva y proveedor del club, posee el 5,32 %.
Su relación con la marca del felino es análoga a la del Bayern Múnich con Adidas, también en cuanto a rivalidad. Ambos mantienen un vínculo comercial desde 2012 y su acuerdo actual se extiende hasta 2028. Para subrayar su compromiso a largo plazo, Puma compró una participación en el club en 2014.
“El BVB es una de nuestras asociaciones más exitosas en el fútbol junto con los mejores clubes europeos como el AC Milan, el Manchester City y el Olympique de Marseille. Conocido por sus fanáticos apasionados y su formidable atmósfera, el BVB es uno de los equipos con mejor apoyo del mundo y su promedio de asistencia en casa se encuentra entre los más altos del fútbol europeo”, comentan fuentes de la multinacional a EFE.
La propia corporación, además de vestir al Borussia, dispone de acuerdos particulares con varios jugadores de la plantilla del BVB, entre ellos Sebastien Haller, Gregor Kobel y Marco Reus, quien ya anunció su marcha del club al término de esta campaña.
Un temporada que está suponiendo un impulso económico para la relación entre ambas instituciones gracias la trayectoria en Liga de Campeones, como así confirma Puma: “Estamos entusiasmados con el increíble éxito que ha logrado el club en la Liga de Campeones de este año, que seguramente aumentará aún más la visibilidad global del club y el número de fanáticos en todo el mundo”.
Aunque la compañía no da cifras oficiales de la relación financiera, sí destacan que han “disfrutado de algunos lanzamientos de uniformes muy exitosos con el club, incluidas ediciones especiales muy solicitadas, como una camiseta que rinde homenaje al legendario estadio Signal Induna Park del club”.
Su palmarés en esta última década se reduce a dos copas y tres Supercopas, además de haber sido vivero de figuras a las que ha revalorizado y vendido a precio de oro, como Mario Götze, Erling Haaland o, recientemente, el propio Jude Bellingham.
Rearmado el equipo con nuevos valores como Karim Adeyemi o la eterna promesa Jadon Sancho, jugadores consolidados Sébastien Haller o Julian Brandt y veteranos de postín como Marco Reus, Mats Hummels o Emre Can, el conjunto amarillo se presenta, como en 2013, nuevamente en Wembley a la conquista de su segunda Copa de Europa.
Allí, al igual que la fiera que representa su firma deportiva, tratará de dar un buen zarpazo al equipo de Carlo Ancelotti y, de paso, seguir engrosando sus cuentas con los cerca de 20 millones de euros que se lleva a casa el campeón.
EFE